¿De dónde viene la luz que vemos?
Desempeños esperados:
Establezco diferencias entre los objetos observados a simple vista y los observados con ayuda de la lupa.
Reconozco y diferencio objetos de tamaño pequeños.
Estándar de sociales:
Uso diversas fuentes para obtener la información que necesito (entrevistas a mis familiares, fotografías, textos escolares y otros)
Reconozco en mi entorno cercano las huellas que dejaron las comunidades que lo ocuparon en el pasado (monumentos, museos, sitios de conservación histórica..)
Estilos de aprendizaje:
Inteligencia visual: Cuando se apagan las luces ellos fácilmente identificarán cual es el cambio y pueden analizar la dilatación de las pupilas.
Para la actividad de diferenciación de fuentes de luz se pueden usar imágenes de apoyo y vídeos para integrar los otros estilos.
Podrán observar la dramatización de la situación y la historia para comprenderla fácilmente.
Cuando observen las otras fuentes de luz las podrán relacionar con su diario vivir y las clasificarán fácilmente ya que previamente habían tenido un apoyo gráfico.
Inteligencia auditiva: El vídeo será una buena herramienta para facilitar la comprensión del tema, además las lecturas a viva voz le permitirán interactuar y participar en toda la actividad.
Inteligencia kinestésica: Analizaran los cambios en su cuerpo (pupilas y sombras) con la luz solar y la eléctrica.
Se les puede llevar las fuentes de luz en material concreto para que tengan la oportunidad de percibirlas por sus cinco sentidos.
Tienen la capacidad para dramatizar la situación y la historia con el apoyo de un narrador.
Proyectos transversales
Proyecto económico y financiero: Se promueve el ahorro del agua y la energía eléctrica.
Proyecto ambiental: Desarrollo de una cultura ambiental positiva entorno al ahorro de los recursos y compromisos para transformar el planeta.
Sesión 1
¿Hay luz en este lugar? Es la pregunta que da inicio a esta fase. Les puede preguntar ¿De dónde viene la luz? Si la conversación gira en torno al bombillo apague las luces para que ellos propongan otros tipos de energía, posiblemente también mencionen el sol y en ese momento se les puede preguntar ¿Cuál es la diferencia entre la luz solar y la luz eléctrica?
La información se puede recoger en un cuadro comparativo de la luz eléctrica y la solar, en el conversatorio los niños hablaran de acuerdo a sus experiencias.
Luego presénteles una pequeña situación:
No habrá servicio de energía eléctrica por algunos días en el municipio ¿Qué otras fuentes de luz utilizarías durante la noche?
Se harán dibujos en el tablero sobre la información que ellos den y serán clasificadas en naturales y artificiales, en ese momento se puede hablar de fuentes renovables y no renovables.
Para facilitar la actividad puede preguntarles por ejemplo ¿Qué pasa cuando hay tormenta?, ¿Cuándo salimos al campo en la noche qué luces vemos? Lo que se espera es que puedan mencionar como fuentes de luz los rayos, el fuego, las estrellas y organismos bioluminiscentes como las luciérnagas. Se oscurecerá el salón para mostrarles diferentes tipos de luz (linternas, bombillos, laser, luces neón, incienso, fuego)
Como tarea queda consultar como hacían sus padres o abuelos para obtener luz en la noche, teniendo como apoyo las siguientes preguntas:
¿Qué fuente de luz utilizaban?
¿En qué época?
¿Cómo la obtenían?
¿Cuáles eran los riesgos de utilizarla?
Sesión 2
Se compartirá la información de la consulta, continuaremos con la lectura de un breve relato sobre la historia de la búsqueda de la luz que ha tenido el ser humano desde tiempos primitivos:
Las primeras lámpara eran palos ardientes o recipientes llenos de brasas, luego algunas personas se percataron de que la grasa animal y vegetal ardía con una llama de color amarillo brillante, así que comenzaron a utilizar aceites para humedecer astillas de madera haciendo que estas emitiera una luz más intensa y por más tiempo. Este fue el primer paso para la invención de las lámparas de aceite, artefactos usados en todo el mundo. Las lámparas de aceite se hacían con recipiente de piedra, hueso, arcilla o concha, que contenía un aceite o sebo en el que se sumergía una mecha de algodón. El aceite que se utilizaba para estas lámparas variaba de acuerdo a los recursos de cada lugar, de modo que se utilizaba sebo, aceite de oliva y hasta grasa de animales como ballenas, focas y pingüinos. Aunque las lámparas de aceite funcionaban mejor que las brasas o astillas de madera encendidas, el aceite no es un material fácil de manejar, pues requiere estar muy caliente para empezar a arder y luego se consume muy rápidamente. Antes de que se inventara el alumbrado de gas, existía una gran demanda de aceite animal, lo que llevó a la caza de muchos animales marinos.
Esta actividad puede servir de reflexión sobre el mal uso de recursos.
Autor: Anngie Vélez Salazar
Autor: Anngie Vélez Salazar
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